Oleato de sumidades florales de LAVANDA
En los meses de verano, sobre todo junio y julio la Lavanda está lista para ser recogida. Con ella podemos elaborar una gran variedad de productos de uso cosmético y terapéutico.
Hoy estoy elaborando OLEATO DE LAVANDA. Un preparado de flores de Lavanda maceradas en aceite de oliva extra virgen (arbequina).
Para asegurarnos que la esencia está presente en las sumidades florales debemos seguir unas normas básicas antes de recolectarlas. Y siempre lo haremos con una actitud amorosa y de agradecimiento.
- La mejor hora suele ser antes del mediodía y a última hora de la tarde.
- Las flores deben estar un 30% abiertas, un 30% a medio abrir y un 30% cerradas.
- Recogerlas cuando la Luna se encuentra en un signo de Fuego (aries, leo, sagitario).
- En días soleados y secos.
Una vez recogidas, a mi en particular, me gusta desgranar las flores a mano sobre el aceite extra virgen. Es un momento muy mágico, de conexión con la naturaleza y su poder. Al terminar de desgranar, cierro el recipiente y lo dejo macerar durante 1 luna completa. Podéis dejarlas las noches de luna llena a la luz de la luna. Pasado este tiempo las filtro y envaso el aceite, que adquiere un olor muy profundo a Lavanda.
La Lavanda es una planta que tiene su propia historia. Muy presente en la cultura popular, desde antaño han sabido nuestras antepasadas extraer sus múltiples virtudes y elaborar desde ungüentos mágicos hasta pomadas calmantes y saquitos ahuyenta demonios. Muy mediterránea, nuestra propia naturaleza está muy conectada a la información que trasmite la Lavanda… En los trabajos de Arquetipos femeninos, la Lavanda habla con la Anciana y la Bruja. Es una planta sabia y como tal nos conecta con la fase de Luna Oscura lunar.
Entre sus muchas propiedades las más destacadas son:
- Gran hidratante de la piel.
- Cicatrizante.
- Borra las rozaduras.
- Calma el dolor muscular y articular.
- Emoliente en caso de durezas.
- Desinfectante sobre quemaduras.
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